Una estrategia para hacer crecer tu dinero
Generalmente ahorramos o invertimos por tradición, miedo, desconocimiento y/o recomendaciones tanto de amigos, conocidos y familiares o simplemente por el ejecutivo de servicio de la institución donde guardamos nuestro dinero, pero difícilmente consultamos a un especialista. ¿Realmente estás ahorrando o invirtiendo en lo que deberías invertir?
¿Y qué necesito para asesorarte?
Inicialmente solo necesitas estos cuatro datos.
Correo electrónico
Tus objetivos de inversión
¿En qué tipo de inversión estás actualmente?
Tengo 65 años, sigo trabajando y tengo invertido al 100% en Renta Variable México. Mis hijos ya son independientes y esta inversión es para mi jubilación.
Tengo 38 años y quiero alcanzar mi independencia financiera. Mis ahorros están al 100% en un pagaré bancario y este ahorro es para mi retiro.
No se requiere tu nombre, ni dirección, ni RFC ni números de cuentas, ni claves, no se requiere ningún dato personal que te haga sentir incómodo de ninguna forma.
Respetamos tu privacidad y nunca compartiremos tus datos personales.
Pedir una opinión adicional nunca está de más. ¿La persona que hoy te asesora está realmente capacitada para sugerirte inversiones? ¿Conoce las opciones que existen para diversificar? Y la pregunta más importante ¿Es una recomendación que le conviene a quién, al ejecutivo de servicio, a la institución o a tu patrimonio? ¿Te están cobrando la comisión o diferencial correcto?
Tu beneficio es darte la oportunidad de escuchar una recomendación de un especialista reconocido. Puedes escucharla y no hacer nada y seguir como estás, o hacer cambios y aprovechar los mercados. Recuerda que los mercados financieros siempre han estado ahí, el tema es saber cómo utilizarlos. Nuestro beneficio es asesorarte y, si lo deseas, te recomendamos dónde, cómo y cuándo invertir a través de fondos de inversión de los bancos más importantes y gestores de fondos aquí en México.
Desde solo tomar la recomendación y aplicarla por tu cuenta, hasta dejarnos asesorarte bajo el concepto de arquitectura abierta. Es decir, una estrategia con fondos de inversión del sistema financiero mexicano.